…amanecí miao!!

Me sentía insuflado de una libertad plena. Tanta, que deambulaba desnudo por ahí, me encantaba, porque solo yo lo sabia.
Mientras pululaba me encontré con una chica radiante, chula, gustosa, muy gustosa, de las que les gusta gustar y tener en las manos las cadenas de todos los perros para pasearlos a su antojo. No distinguía bien si estaba vestida o no, no importaba.
Por alguna razón extraña no podía comunicarme con ella a pesar de tenerla enfrente, no la alcanzaba, no la podía tocar. De pronto empecé a hablar, y de mi boca salían unos papelitos que llevaban mensajes cargados de pasión. Los papelitos esos salían por duplicado, los leía Yo mientras los hablaba, y los leía Ella mientras se reía. Me encantaba que se riera, la risa contrae los esfínteres vaginales y yo fantaseaba con eso.
Jugamos? le pregunté jugando. Juguemos, me dijo sin decirmelo, y jugamos...o al menos eso pensaba yo.
A mi, después de un tiempo de emitidos, los papelitos se me desaparecían de enfrente, pero con los de Ella no sabia lo que pasaba, su forma de jugar me inspiraba confianza...que error!
El juego de papelitos nos acercó suficiente. Tanto, que nos pudimos besar, dos, tres veces...y como besaba la maldita!!! El ultimo beso fue delicioso, termino en un “la la laaaa” medio cantado, muy divertido.
De nuevo algo nos alejó...y volvieron los papelitos. Pero ahora el tono era distinto. El suyo, se había convertido en un juvenil juego de seducción, que me resultaba muy divertido alimentar. Me dejo probar su miel para exacerbar mi deseo, y ahora me decía que NO. Quería tener mi cadena también en sus manos y para tratar de agarrarla, por ser yo un perro mas dificil, me dio alguito mas de carne, no mucha, solo la suficiente.

Yo tontamente preferí creerle a la boca que me había besado, y no a la que ahora me hablaba en duo-tono.

De algún modo extraño, como son los sueños, me enteré de que mis papelitos, cuando ya eran SUS papelitos, no los leía sólo Ella. Sus ojos estaban conectados a una red donde compartía, y otros también vieron, la evidencia de mi desnudez. Su boca se había convertido en un altavoz que yo no podía oir. Lo que no puso en SU red fue como sus besos alimentaban el juego.

Entré en pánico!!. No tenia idea de cuanta gente leyó mis papelitos!, no sabia con cuanta gente su alta voz me había convertido en tema.
Subitamente empecé a sentir que estaba rodeado de gente , a las que no les podía poner rostro, que me miraba completamente desnudo.
Me senti traicionado, me llene de ira, de rabia, de ganas de matarla!!! Y lo peor!…de impotencia!!. De esa sensación de vacío. De esa ansiedad terrible que se siente cuando sabes que sencillamente ya no hay nada que hacer!! Para mi, todos me vieron desnudo!! y no tenía forma de saber cuantos, ni que tanto.
Probablemente, en otras circunstancias, no me hubiera importado mucho, no tengo ningún problema con la desnudez, me parece bella. Pero en este caso me molestaba como nunca!.
En un momento me vi a un espejo, y mi reflejo me dijo: “sigue ahí !!…tu no querías jugar con fuego?!, no haz oído lo que dice el refran aquel sobre lo que les pasa a quienes se acuestan con carajitas?!?!”
Me pegue mil bofetadas, me sentí como el mas tonto. Claro, coño, que para Ella este juego no tenía sentido, si no lo podía compartir!!!…pero qué, maldición , fue lo que no me dejó ver eso a tiempo!?!?. Si de pronto recordé que cuando nos dimos los primeros besos le advertí que lo haría, que saldria a gritar nuestro juego, y me respondió con un “no, claro que no!…quien, yo?”, tan poco convincente, que solo las ganas de mas besos explica mi obnubilación.
Lo peor es que no puedo odiarla. Seguía siendo tan niña y tan chula como siempre, y era evidente que quería seguirme gustando!.
Mierda!.. Que maldito manojo de emociones encontradas!!! Me hervía la barriga!, todo esto me parecía paradójicamente muy excitante!

De este puto sueño SI que me quise despertar!!… desperté, y no me lo quiero soñar otra vez!!


Pero es asi, por estarme soñando con carajitas...